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Índice de documentos presentados sobre el Dr. Fernando Altamirano

domingo, 31 de julio de 2016

20 de julio de 1860. Nacimiento en Querétaro de María Margarita Altamirano Ruiz, media hermana del Dr. Fernando Altamirano

20 de julio de 1860. Nacimiento en Querétaro de María Margarita Altamirano Ruiz, media hermana del Dr. Fernando Altamirano.  Ella es hija de Manuel Altamirano  y de Guadalupe Ruiz, quienes viven en la calle de las rejas en Santiago de Querétaro, y será bautizada el 23 de julio de 1860, en la Iglesia del Espíritu Santo, con el nombre completo de María Margarita Francisca de Paula de Jesús Altamirano.


31 de julio de 1906. El microbio del tifo.

31 de julio de 1906. El periódico El Tiempo informa que el Dr. Fernando Altamirano ha sido nombrado como uno de los médicos suplentes en la comisión que juzgará los trabajos que se presenten en el concurso de estudios sobre el tifo, el cual fue convocado por el Gobierno Federal y la Academia Nacional de Medicina, el pasado 25 de julio de 1906.


31 de julio de 1905. Informe del Director.

31 de julio de 1905. Informe del Director. Tengo la honra de comunicar a los señores profesores de esta H. Junta, que en el presente mes de julio he concluido varios trabajos científicos y comenzado otros; y además, he arreglado diversos asuntos relativos al servicio científico y económico del establecimiento. De los trabajos científicos, están ya terminadas dos memorias que se refieren al “Palo amarillo”… Otro de los trabajos que terminé, fue la parte expositiva del programa del trimestre de julio a septiembre de este año… Hice dos excursiones botánicas: una a la Hacienda de la Encarnación, propiedad del Sr. Dr. Capetillo, en compañía del Dr. Urbina y del Dr. Rose, con sus dos ayudantes… Se colectaron cincuenta especies de plantas que lleva el Sr. Rose en su herbario. Nosotros nos quedamos con los especímenes poco comunes, y de los cuales nos dará la clasificación el Sr. Dr. Urbina. La segunda excursión fue a los cerros de Cuautepec, de la Serranía de la Villa de Guadalupe, en compañía del Dr. Rose y de sus ayudantes. La colecta fue también excelente, pero más bien para el Sr. Rose que para mí. Yo, sin embargo, colecté una planta que se dice ser muy venenosa para las cabras. No me dieron el nombre vulgar, pero el botánico es Talinum napiforme, DC…, aún estamos en duda de la acción tóxica. Herbario Altamirano, su clasificación.- me he ocupado, también, de la clasificación de las plantas colectadas por mí en todas mis excursiones. El Sr. Dr. Urbina y el señor profesor Alcocer están encargados especialmente de este trabajo y yo les ayudo”.




31 de julio de 1903. Informe mensual del director del Instituto Médico Nacional.

31 de julio de 1903. Informe del director del Instituto (Médico Nacional). Tengo la honra de comunicar a la Junta de Profesores que los trabajos para la construcción del edificio se han llevado con más rapidez, y que es muy probable que podamos utilizar el salón de la Dirección para efectuar en él una junta general el día 14 del que entra, aniversario de este Instituto… Debo comunicar a ustedes también, que se han recibido de Jojutla, remitidas por nuestro buen colaborador el Dr. Espinosa, muestras de copalchi, de quina y de tecnampatli. Con el Sr. Ramírez he hecho algunos estudios de esos ejemplares y he practicado cortes histológicos para hacer las identificaciones correspondientes… Igualmente estudié histológicamente una droga remitida de Iguala, por un Sr. Gómez a quién se había encargado, llamada palo de adivinar… El Sr. Dr. D. Donaciano González, que ejerce en Cosamaloapan (Veracruz), me escribe pidiéndome datos acerca de una esencia que llama quinopodio, la que supongo sea la del epazote… De esta comunicación resulta algo interesante que consignar: que si es cierto que la esencia usada en Cosamaloapan es de epazote, quedan comprobadas con estas observaciones las propiedades vermicidas que la Sección 4ª no tuvo oportunidad de comprobar.




Memorial Terapéutico de Plantas Mexicanas. 31 de julio de 1896.

31 de julio de 1896. El Dr. Fernando Altamirano presenta la advertencia de su libro Memorial Terapéutico de Plantas Mexicanas.  En ella menciona: “Hace algunos años que mis discípulos en la clase de Terapéutica me han manifestado vivos deseos de conservar escritas las notas que sobre las aplicaciones médicas de nuestras plantas les he comunicado en las lecciones. Atendiendo a esta justa pretensión, y a que puede ser de utilidad esa especie de formulario de plantas del país…, me decidí a darlas a luz”.  Y termina: “¡Ojalá que este pequeño trabajo sea útil a mis discípulos! ¡Quiera Dios que surja de esa generación médica, el genio que deba constituir la Terapéutica Mexicana!