"Habiendo desaparecido varios útiles del departamento de herrería de la Hacienda de Aragón, propiedad de la testamentaria del Sr. D. Hermenegildo González y ubicada cerca de la Villa de Guadalupe Hidalgo, el administrador de la finca…, dispuso que varios empleados siguieran las huellas de los ladrones, encontrándose oculta parte de la herramienta robada en un punto llamado Río Unido… A fin de descubrir a los autores…, el mismo Sr. Hierro comisionó a Encarnación Morales para que le diera aviso tan luego viera gente sospechosa que se acercara al lugar donde se hallaba la herramienta. Cerca de las seis de la tarde… recibió el aviso… Al llegar al lugar a donde se encontraban los ladrones y ser notados por éstos recibieron algunos tiros de pistola… El estado del Sr. Hierro es grave; sin embargo el Dr. Altamirano abriga esperanzas de poder salvarlo”.
El periódico El Universal del sábado 18 de agosto, agregará: “aun cuando ha sido grande la pérdida de sangre de la víctima se ha podido hasta después de la operación contrarrestar el peligro”.
Poco después de diez días, el lunes 27 de agosto de 1900, los periódicos El País y El Popular, señalarán que el Sr. Gregorio Hierro será dado de alta por su médico el Sr. Dr. Fernando Altamirano, que entrará en un periodo de convalecencia, y que antes de otros ocho días estará perfectamente restablecido.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario